Los 8 mayores mitos en torno al marketing digital

Desde que IBM lanzó al mercado el primer ordenador personal en 1981, la forma de trabajar, ofrecer productos y servicios e interactuar con otros ha cambiado completamente. Para algunos, ese desarrollo tecnológico marcó el inicio de lo que ahora conocemos como marketing digital.

A partir de allí, muchas industrias y puestos de trabajo comenzaron a reconvertirse para no quedar atrás. Y quienes no asimilaron el cambio de paradigma, o lo hicieron demasiado tarde, sufrieron las consecuencias. Es el caso de empresas como Kodak, Xerox, Blockbuster o JCPenney.

Sin embargo, este crecimiento vertiginoso también trajo consigo muchas dudas, errores y sobre todo mitos en torno al marketing digital. A 38 años del hito logrado por IBM con el primer PC comercializable, para muchos el marketing digital es un ámbito opaco, lleno de cortinas de humo y que realmente no tiene efecto alguno en los resultados de un proyecto o negocio.

Y así surge una pregunta muy difundida: ¿para qué sirve el marketing digital?

En este artículo nos enfocaremos en 8 ideas relacionadas con el mundo online que más de una vez hemos escuchado, e incluso dicho, pero que necesitan ser matizadas. Toma nota porque seguramente has caído en más de uno de estos mitos de la era digital.

1. “El marketing digital es una inversión de dinero que no se recupera”

El ser humano es un poco desconfiado, pero ¿y si te contamos que el marketing online te proporciona en tiempo real todos los datos que necesitas conocer sobre tu campaña?

Así es. Mediante herramientas como Google Analytics puedes conocer la rentabilidad de tus acciones de forma diaria e incluso mejorar tu ratio de conversión.

Por supuesto, el retorno total de la inversión no es instantáneo y, aunque puedes observar mejoras a corto plazo, lo mejor es ver el crecimiento exponencial que aparece a largo plazo.

Además, piensa que los negocios que utilizan herramientas de marketing digital tienen la posibilidad de triplicar sus ingresos y es mucho más económico que hacer una campaña de medios offline.

2. “Es una moda, no hace falta entrar en ella”

Estos últimos años de intensa actividad en redes sociales, desarrollo de inteligencia artificial, marketing inbound e Internet de las cosas, entre muchos otros ámbitos, nos demuestran que el marketing digital no es una moda efímera. Ha llegado para quedarse y continuar evolucionando.

Pero, aunque así fuese, las modas siempre vuelven. Depende de ti si quieres que su regreso sea para atormentarte en tu negocio local o bien para ser utilizado como una herramienta a tu favor.

Un claro ejemplo de lo que ocurre cuando no echas un vistazo a lo que está pasando a tu alrededor es Borders, una cadena de librerías muy conocida en el mundo anglosajón. Abrió su primera tienda en 1971 y construyó un verdadero imperio en torno a la lectura con más de 400 librerías en Estados Unidos y otros países como Canadá, Australia y Reino Unido.

Sin embargo, no supo adaptar su modelo de negocios al mundo digital. Pese al nacimiento de Amazon Kindle en 2007. Pese al lanzamiento de la tablet Nook por parte de su competidor Barnes & Noble. Pese al iPad de Apple en 2010.

Todas estas nuevas tecnologías transformaron la forma en que los usuarios consumen libros y textos en general. Y Borders lo entendió, aunque demasiado tarde, a través del lanzamiento de la plataforma Kobo en 2011.

Ese mismo año la empresa se declaró en bancarrota, cerró 399 tiendas y despidió a más de diez mil empleados.

Lo que está claro es que en algún momento tendrás que subirte a la ola del marketing digital. Si no aprendes a surfear, pronto quedarás malherido.

3. “No necesito nada más que una página web”

Actualmente crear un sitio web para tu negocio es un paso básico. Y, si bien esto puede requerir bastante trabajo en cuanto a diseño, contenido y desarrollo web, es solo un primer paso dentro de tu estrategia.

¿En qué se traduce esto? En que tus contenidos no deberían ser estáticos, por ejemplo. De poco sirve crear tres o cuatro páginas de servicios y colgar tu web sin más. La información, tal como los intereses de tus potenciales usuarios, es cambiante y debe ser adaptada cada cierto tiempo. Tu sitio web debe ser mucho más que una mera versión digital de tu tarjeta de presentación.

Por otra parte, es necesario difundir tu empresa a través de medios sociales. Recuerda: tus objetivos deben ser específicos, medibles, alcanzables, realistas y ser implementados a tiempo.¿Tienes una estrategia de email marketing? Como ya te hemos contado, este tipo de acciones puede dar resultados formidables en cuanto a conversión y visibilidad de tu marca.

Y, si bien existen muchas otras formas en que puedes expandir tu negocio en materia digital, te sugerimos solo un par más: anuncios de pago tanto en las redes sociales como en Google Ads, por ejemplo; y la optimización de tus webs vía SEO.

4. “Si mi sitio web no es responsive, ¡da igual!”

Si nunca has escuchado la expresión “mobile first”, tenemos que hablar. Pero antes, es necesario entender qué es el diseño web responsive: se trata de un método de diseño web que permite que los sitios se adapten a diferentes dispositivos de manera automática, con el fin de presentar el contenido correcta y cómodamente a los usuarios.

En este sentido, “mobile first” significa que el diseño de un proyecto web comienza desde la versión móvil, que suele tener más restricciones, y luego se expande a las versiones para tablet y desktop.

Es aquí donde entran en juego múltiples factores como el uso de breakpoints.

Pero, ¿vale la pena trabajar tanto en un diseño responsive? A continuación tienes un par de datos interesantes:

• En España, las suscripciones de móvil han aumentado en dos millones (crecimiento de un 4,3%) entre enero de 2018 y enero de 2019, de acuerdo al informe We Are Social Digital 2019 creado por Hootsuite.
• Las propias directrices de Google indican que “la indexación mobile-first significa que usaremos la versión móvil de la página para indexar y rankear, con el fin de ayudar más a que nuestros usuarios –prioritariamente móviles- encuentren lo que están buscando”.
• Actualmente el 62% de los usuarios acceden a internet usando sus teléfonos móviles, según un estudio de Statista.

5. “Generemos contenido a tope, con esto basta para que el mundo nos vea”

Una vez decides iniciar tu proyecto web, comienzas una carrera contra el tiempo para generar contenido y creas un blog. Hasta aquí todo bien. Sin embargo, necesitarás antes una estrategia y pensar bien en tu enfoque de contenidos.

Seguramente no tienes intención de ello, pero si no tienes una táctica estudiada acabarás con una sobreproducción de propuestas, artículos y posts que luego tendrás que revisar uno a uno para ver si el contenido encaja con:

• El tono/estilo de tu negocio.
• El SEO y las palabras clave relacionadas con las búsquedas de tus clientes o potenciales clientes.
• El diseño de tu blog o web. Si es más desenfadado u ofrece un estilo más relacionado con la seriedad o la formalidad.
• El público o sector al que va dirigido y mediante qué herramientas lo darás o conocer. ¿Difundirás tus contenidos a través de Instagram, Facebook, Linkedin, emailing…?

6. “Mis consumidores son así, asá y seguramente querrán esto”

Por mucho que creamos conocer a nuestro consumidor o cliente, puede que no estemos en lo cierto. Debemos indagar e investigar más sobre nuestro público, su entorno, intereses, inquietudes y revisarlo de una forma regular.

Solo así sabremos con seguridad de qué manera podemos satisfacer sus demandas de productos, servicios e información en general. Esto definirá el perfil de nuestro target.

Para conocer del todo a tus clientes es muy importante analizar en qué redes sociales están registrados y, de esta forma, saber si son fieles a una red en concreto.

De ese modo podrás tener una comunicación bidireccional, más directa y con garantías de impactar de forma cualitativa sobre tu target.

7. “¿De qué sirve el SEO?”

Si la industria del marketing digital está llena de autoproclamados gurús, el subsector del posicionamiento web es seguramente uno de los que más expertos de este tipo aporta. Sin embargo, esto no quiere decir que el SEO sea una cortina de humo o que no tenga impactos positivos en tu proyecto online.

De hecho, posicionar bien es absolutamente fundamental si quieres ganar visibilidad de manera orgánica, aumentar tu reputación y llegar a públicos que ni siquiera hubieras imaginado con el marketing offline.

En el sector se suele decir que el mejor lugar para esconder un cadáver es la segunda página de Google. Esto quiere decir que ubicarte en las primeras posiciones de tus principales keywords, producir contenido de valor para tu público y optimizar tu web en cuanto a velocidad y diseño, entre otros, puede marcar la diferencia entre un negocio con leads online y otro que se estanca.

¿Tu negocio está listo para la batalla en los motores de búsqueda? Hasta un 90% del tráfico se origina a través de búsquedas online, según HubSpot. Es más, casi tres cuartos de las personas usa los resultados de los motores para encontrar inspiración en esos momentos de “impulsos consumistas”, de acuerdo a cifras de Think with Google.

8. “Mi sector de trabajo es poco sexy, nadie querrá consumir mis contenidos”

Este mito se puede destruir fácilmente. En redes sociales como Instagram, YouTube o Pinterest existen empresas dedicadas a la fabricación de ventanas de aluminio, parquetistas y muchos otros profesionales de ámbitos que a simple vista no parecen sexys, pero que pueden encontrar su nicho en internet.

¿Cuál es la clave? En primer lugar, entender quiénes somos como empresa, qué productos y servicios ofrecemos, quiénes son nuestros potenciales clientes y qué imagen de marca queremos construir. Una vez definidas estas líneas generales, podemos comenzar a trabajar en nuestro marketing de contenidos.

Ahora que conoces los 8 mitos más populares en torno al marketing digital, te invitamos a explorar las oportunidades que este ámbito puede ofrecer para tu marca personal, tu negocio o tu próximo proyecto web.